“No hay descanso en México, ya he perdido la cuenta de los periodistas que fueron asesinados”, lamenta Rosa Isela Pérez Torres, periodista mexicana exiliada en España, quien comparte con otros compañeros de profesión la urgencia de un acuerdo internacional que vele por los derechos de la prensa a nivel mundial.
Desde el año 2000, 150 periodistas fueron asesinados en México, 138 hombres y 12 mujeres, situando al país en el puesto 143 de 180 naciones que conforman la lista de países más seguros para la prensa que realiza la asociación Reporteros Sin Fronteras (RSF).
Alfonso Margarito Esquivel, José Luis Gamboa Arena, Lourdes Maldonado, Roberto Toledo y Héber López son los nombres de los cinco periodistas asesinados en lo que va de año en México, entre las ciudades de Tijuana, Veracruz, Zitácuaro y Salina Cruz.
El trabajo de Rosa Isela, natural de Ciudad Juárez, donde colaboró con medios impresos antes de verse obligada a exiliarse a España, estaba focalizado en violencia contra la mujer, en un país en el que ocurren diez feminicidios al día. Tras recibir varias amenazas de muerte, la periodista empezó a temer no sólo por su vida, si no por la seguridad de su familia y de sus hijos, obligándola a exiliarse.
En ese momento me sentí muy sola, no contaba con el apoyo del medio. No podía poner una denuncia cuando son ellos mismos (la policía) los que están implicados en esta situación”, señala la periodista que tras ser despedida de su trabajo fue boicoteada por el resto de empresas del sector.
Según Rosa Isela, gran parte de la tragedia que sufren los periodistas mexicanos se debe a que fuerzas muy poderosas relacionadas con el narcotráfico y el crimen organizado gobiernan México: “los periodistas son los únicos que se enfrentan y reflejan este problema, y esto molesta a grupos muy poderosos, incluso internacionales”, señala.
Porque, cuando matan a los periodistas, “¿qué queda?, si no puedes confiar ni en la información”, manifiesta decepcionada y preguntándose si la población realmente es consciente del alcance de este problema.
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