Miedo e inseguridad en Morelia
Por: Juan José Rosales Gallegos
Morelia, Michoacán a 15 de junio de 2017.- El asesinato del Comandante Regional de la PGR, Enrique Rodríguez, ocurrido a plena luz del día en una de las vialidades más importantes de la capital michoacana, levantó una oleada de indignación y preocupación. Los morelianos nos sentimos inermes y vulnerables ante la escalada de violencia. Los reclamos a la administración municipal son directos y constantes, y llegan a tal grado que el diputado local del PRI, Mario Armando Mendoza ha solicitado al estado, que en pleno uso de sus facultades asuma la seguridad de Morelia. Y si el estado no tiene la capacidad, se solicite de inmediato el apoyo de la federación.
Daniel Moncada, legislador de Movimiento Ciudadano señala como responsable de la degradación de las condiciones de seguridad en Morelia al alcalde, Alfonso Martínez: “No puede, no quiere no sabe y no se deja ayudar. Sigue encaprichado en querer seguir experimentando como si él y su equipo fueran expertos. No puede con el tema”, afirma. Sin mencionar la fuente, Moncada coloca a Morelia como la más violenta de Michoacán y una de las 30 ciudades más violentas del país.
Del Partido Verde, Ernesto Núñez (que en algún momento será oficialmente aspirante a la alcaldía vallisoletana) advierte que, una cosa es el discurso y otra muy distinta la cotidiana incertidumbre que se enfrenta en la ciudad. “El ayuntamiento declara que están haciendo esfuerzos, pero en las colonias y comunidades no se nota. Dicen que mejoran los índices, pero a diario hablan los amigos de que robaron una casa, un auto o secuestraron a alguien”. Núñez también critica la reciente visita que, mandos de la policía federal realizaron a Morelia en la que “reconocieron” la estrategia de seguridad. ¡Cual estrategia!, reacciona, “existirá en un documento o en el escritorio del presidente municipal porque en la realidad no se siente”.
Héctor Gómez Trujillo, diputado panista identificado con el grupo de los Calderón fue muy condescendiente en el tema, y sin exculpar a la administración de Alfonso Martínez, si reparte la culpa entre los tres órdenes de gobierno. Recordó que hace algunos meses, “en el Congreso se presentó un Punto de Acuerdo en el cual solicitamos se firmara un Acuerdo Por La Seguridad de Michoacán, en el cual los tres niveles de gobierno asumieran responsabilidades concretas y se fijaran objetivos, plazos y fechas claras para conseguirlos”.
“No podemos seguir pateando el bote”, dice el legislador blanquiazul.
La negativa de Alfonso Martínez de adherirse al Mando Único del estado, y su insistencia en aplicar esquemas académicos en materia de seguridad pública, que no han funcionado en la práctica, han llevado al límite la paciencia de los morelianos.