Por: Juan José Rosales Gallegos.
Morelia, Michoacán a 13 de octubre 2021.
La frase pronunciada por el presidente Andrés Manuel López Obrador el 9 de octubre en el Palacio de Gobierno de Morelia fue lapidaria: “Yo voy a estar recorriendo, visitando Michoacán. Ahora, ya no voy a tener nada que me impida venir libremente”. El destinatario y la referencia es por demás evidente.
La presentación del llamado Plan de Apoyo a Michoacán, más allá de un acto de gobierno con la presencia de todo el gabinete federal, fue la unción de Alfredo Ramírez Bedolla como el jefe político del estado, quien ahora se yergue fulgurante sobre las ruinas de su antecesor.
“Decirle al pueblo michoacano que el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla cuenta con todo el apoyo del gobierno federal, por esto estamos aquí… también va a ser mi representante en Michoacán, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla.
Él me va a representar y va a coordinar todas las acciones del gobierno federal en Michoacán”, se ufanó el presidente presumiendo a uno de sus preferidos.
Al final, el espectacular desplante sirvió para realizar un recuento de “acciones” y repetir promesas que todavía no se han cumplido.
El 5 de abril de 2019, el entonces gobernador, Silvano Aureoles, realizaba una gira de trabajo en el municipio de Churintzio, previo al evento que presidiría en Zacapu, López Obrador, la presentación del avance del Sistema de Universidades, Benito Juárez, en el cual estaría presente.
Una anécdota de ese día que permite explicar mucho de lo que ocurre en el presente: Aureoles fue enterado por el equipo del presidente, que se abstuviera de buscarlo y que bajo ninguna circunstancia lo recibiría antes del evento.
No era la intención del Gobernador, según se pudo confirmar después, abordar a Andrés Manuel pero, ahí queda el antecedente.
En 2019, desde Zacapu, el presidente López Obrador anunció: En el caso de los maestros, aquí en Michoacán les digo que estamos dispuestos, se lo he comentado al gobernador, y estamos en la mejor disposición para que se federalice todo el sistema educativo.
Para detallarlo, significa que la federación se hace cargo de todo lo que tiene que ver con la educación en Michoacán. Esto ocurrió hace poco más de dos años.
El sábado 9 de octubre de 2021, en Morelia Michoacán, López Obrador retomó el tema, con un distinto enfoque, pero finalmente volvió a comprometerse a lo mismo: Hemos convenido con Alfredo (Ramírez Bedolla), que se va a tener una sola nómina y que se va a federalizar toda la nómina de los maestros michoacanos y ya no se va a enviar el dinero.
Aunque Alfredo es un hombre honesto, muy distinto a otros, de todas maneras, ya no habrá intermediarios, se le va a entregar de manera directa a las maestras y maestros su salario.
Siguen transcurriendo los meses y la sequía financiera en el sector educativo no se revuelve; mientras las promesas siguen fluyendo, al mismo ritmo los problemas crecen.
Decepcionante será para el gobierno estatal darse cuenta que, “federalizar la nómina”, no vendrá a solucionar los problemas financieros del sector. El gobierno federal ya lo sabe, por eso no lo ha hecho.