MICHOACÁN 2021
Las encuestas y la falta de oficio político
Por: Juan José Rosales Gallegos
Morelia, Michoacán 22 de enero de 2020.- Las encuestas se convierten en una obsesión para algunos políticos, las procuran, las compran, las siguen con un afán enfermizo; las difunden como si la elección fuera a realizarse dentro de una semana. Una ambición desmedida que adelanta tiempos que deben permanecer inalterados.
Resulta curioso como avezados hombres y mujeres que viven de la política se comportan como unos párvulos. Disfrazan sus claras intenciones con trabajo social, atención a la comunidad, gestión y toda actividad que les permita contacto con grupos sociales para poderse tomar una foto y luego difundirla con el único fin de “posicionar su imagen”.
Algunos partidos políticos, en su nivel local, están dirigidos por ignaros que ofrecen cuentas de vidrio a cambio de votos. Colocan como carnada las encuestas incrustadas en el anzuelo de las preferencias. Usan fuegos artificiales para ganar por default una contienda que será cerrada y competida. Lo saben, por eso quieren salir antes que los demás cometiendo una falta en la carrera.
Quienes han dejado claras sus aspiraciones, lo primero que deben explicar, antes de difundir encuestas es, ¿de dónde sale el dinero que soporta su apetito de poder? Cristóbal Arias presume 60 Casas de Gestión en igual número de municipios, y amenaza con abarcar los 113 este mismo año. ¿Quién mantendrá esa estructura durante todo el 2020? Morón y Báez, ¿están dedicando el 100% de su tiempo a ser alcaldes?
Antonio Soto Sánchez, se ganó más enemigos de los que ya tiene, y mermó su presencia política, cuando se le ocurrió la puntada de comprar una encuesta que lo coloca (el que paga manda) como, “el único que crece como posible candidato a la gubernatura”. Juan Carlos Barragán, acompañado de su ambición desbocada y extraviada, no cabe en ningún partido; además, sus amenazas dejaron de inquietar. Alberto Frutis, flota en un lago de impericia, como el lirio que pretende erradicar.
Hay muchos otros que muestran los dientes, y con las garras sostienen la carroña que les queda y ya se sueñan candidatos. Uno de ellos, quiere seguir el “camino de Macron”, aunque lo único que encontrará al fina del sendero será el ridículo. Pintar bardas y recoger basura, es un gran servicio al planeta, nada más.
Los verdaderos políticos, los que aparecerán en las boletas en la contienda del 2021, están haciendo su trabajo de forma discreta. Entienden que en política (en la vida misma), es la circunstancia la que determina, deshecha o precipita las decisiones; no se aceleran ni muestran sus cartas con premeditación.
Decía Don Jesús Reyes Heroles: “La política demanda pasión, pero a la par, mesura, sosiego interno, dominio de sí mismo para no intentar dominar a otro u otros. Aspirar a dominar las cosas, no a los hombres”.
