Bajo la excelsa dirección del maestro Enrique Bátiz Campbell, la Orquesta Sinfónica del Estado de México rindió homenaje a la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, a través de una velada musical que deleitó a los asistentes al teatro José María Morelos.
Con la sala totalmente llena, el pleno del Honorable Consejo Universitario, funcionarios, profesores, alumnos y público moreliano asistieron al estreno de la obra compuesta con motivo de la conmemoración del Centenario de la Casa de Hidalgo titulada Heraldos del Ocaso.
Momentos antes de iniciar el magno concierto, el rector de la Universidad Michoacana, Medardo Serna González agradeció mediante un reconocimiento al maestro Enrique Bátiz por la gentileza de asistir al Centenario, así como al presidente del Patronato de la Orquesta Sinfónica del Estado de México, Heberto Guzmán, por hacer un espacio en su apretada agenda con motivo del Festival Cervantino 2017, para asistir a cerrar con broche de oro la conmemoración de la Casa de Hidalgo como la primera universidad autónoma de México y Latinoamérica.
La ocasión fue propicia también para entregar un reconocimiento y agradecimiento al compositor de la obra al maestro michoacano Eduardo Solís Marín, con una trayectoria en el campo de la composición musical que promete consolidación dentro del ambiente cultural mexicano.
El programa, ejecutado por la Orquesta Sinfónica del Estado de México, por su coro y el Coro del Centenario Nicolaita, teniendo como solista invitada a la violinista de Kasajistán Aiman Mussakhajayeva, incluyó la ejecución del Concierto para violín No. 1, Op. 35 en Re mayor del músico ruso Piotr Ilyich Tchaikovsky, además de la obra Heraldos del Ocaso, con la cual queda una huella cultural del Centenario nicolaita. El público asistente, pudo también disfrutar de las Danzas sinfónicas Op. 45, del compositor ruso Sergei Rachmaninoff.
El maestro Eduardo Solís Marín es reconocido como un excelente músico, de formación profesional, profesor de música en la Universidad Michoacana y el Conservatorio de las Rosas, michoacano de origen, quien es autor de numerosas composiciones donde se deja ver la calidad de la partitura.
Aiman Mussakhajayeva, sobresaliente violinista de la modernidad, es la representante más brillante de la escuela de violín de Kazajistán, realizó sus estudios en el Conservatorio de Moscú, donde estudió con Valery Klimov, prestigiosa estudiante internacional de David Oistrakh.
Ella es la primera solista de la Filarmónica Nacional de Kazajstán y actúa al lado de directores e intérpretes famosos, tales como Simonov, Gergiev, Fedoseev, Sondeckis, Tretyakov, Mansurov, Ashkenazy, Maisky, ha ofrecido conciertos en todas partes de Europa, Japón, Corea, Estados Unidos y América del Sur, con un repertorio que abarca obras de compositores europeos, rusos y kazajas, así como música para todas las edades y estilos.
