Para la atención de situaciones especiales en materia de seguridad, existe una unidad de élite en la Policía Michoacán, el Grupo Delta, conformado por elementos entrenados para intervenir en situaciones de riesgo con operatividad aérea y terrestre, así como para resolver crisis con rehenes o personas secuestradas.
Debido a su alta y eficaz capacidad de respuesta, estos elementos adscritos a la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) son llamados a combatir secuestros y otros tipos de delitos que requiere atención especial. Para su traslado cuentan con el Rino, vehículo blindado todo terreno, que forma parte del equipo táctico para llevar a cabo su labor.
Ante la constante exposición a situaciones de estrés, este personal recibe atención para el manejo de crisis por parte de la Dirección de Atención Física y Psicológica, con el fin de mantener una buena condición tanto física como mental.
Dadas las situaciones, el personal, basado en protocolos de actuación, impide que las circunstancias se salgan de control, en las que algún civil se encuentre en peligro; asimismo están capacitados en temas de intervención policial, aseguramientos, manejo de armas y vehículos.
Unas de las actividades especiales de esta unidad de élite son las labores de intervención aéreas y a rapel. Realizan operativos de detección de narcóticos, y por su facultad ofrecen apoyo a la Procuraduría General de Justicia al ingresar a inmuebles como grupo primario de reacción e intervenir para evitar el riesgo de la integridad física de las personas involucradas.
Confianza, lealtad y sacrificio, valores del Grupo Delta
Para formar parte de este grupo, los elementos deben ser confiables, leales a la institución y la sociedad que protegen, y crear un vínculo de hermandad entre ellos, expresó el encargado de este agrupamiento Aurelio Palafox, al referir que con ello se busca mantener a este equipo en alta capacidad de respuesta.
“Nosotros somos volumen, fuerza. A un llamado llegamos a asegurar a la persona, los trasladamos y ponemos a disposición, somos el grupo de fuerza. El agradecimiento del ciudadano que estuvo en peligro no tiene precio, el simple hecho de ponerla en un estado seguro y que te dé las gracias no tiene palabras. Eso es lo que motiva a pensar que no todos han dejado de creer en nosotros. Es nuestra vocación, aquí afortunadamente estamos por gusto”, afirmó
El personal adscrito a Grupo Delta ha atendido dos partos y ha apoyado en la atención de quejas en la Comisión Estatal de Derechos Humanos. “A donde nos manden, apoyamos, y por eso somos el grupo de confianza y tenemos la fuerza letal para lo que se requiere”, concluyó.