El descaro de Reginaldo y el Partido del Trabajo
Por: Juan José Rosales Gallegos
Morelia, Michoacán a 4 de abril de 2018.- Reginaldo Sandoval, administrador de la franquicia del Partido del Trabajo en Michoacán, ha mostrado en múltiples ocasiones su proclividad a la práctica de la carroña electoral, es un mercenario de las urnas, resultados que traduce en beneficios económicos sólo para él.
La alianza entre el Movimiento de Regeneración Social (MORENA), Partido Encuentro Social (PES) y el Partido del Trabajo (PT), está en riesgo en Michoacán, debido al empecinamiento del PES y PT de apoyar a Fausto Vallejo Figueroa para que contienda por la alcaldía de Morelia. MORENA ya señaló que va con Raúl Morón y por ningún motivo apoyará a Vallejo.
Al explicar las razones por la que el Partido del Trabajo insiste en la candidatura de Fausto, Reginaldo Sandoval muestra su talante mercenario: “La decisión es rentabilidad política porque lo que necesitamos son votos. Creo sinceramente que Fausto ayudaría en el caso de Morelia con más de 120 mil votos”.
Sin medir la consecuencia de sus palabras, el zacatecano (exiliado) Sandoval tacha a MORENA de mentecatos y moralinos, “bloquear a Fausto es una necedad de MORENA y de un extremismo de pureza moral y cosas de ese tipo que desde mi punto de vista no están en juego ahora. Lo que está en juego son votos y lo que requerimos es ganar”, declaró.
Todo instituto político, candidato y dirigente quiere ganar una elección, eso no es una novedad o exclusivo del administrador del PT en Michoacán. Lo que nos debe preocupar es la desesperación de imponer un candidato a cualquier costo. ¿De qué tamaño e$ el compromi$o que exi$te entre Fau$to y Reginaldo? Solo ellos lo saben.
Y de este descaro, ¿qué opinarán las instituciones electorales locales y federales? El INE y el IEM, promotores de la equidad y la imparcialidad harán mutis frente a estas expresiones que de verdad afectan a los ciudadanos. Los órganos electorales están ocupados persiguiendo medios de comunicación y periodistas con la guadaña de la censura.