Candidatos que ocultan información o mienten
Por: Juan José Rosales Gallegos
Morelia, Michoacán 6 de febrero 2021.- Llegamos al terreno de las definiciones. Faltan algunos ajustes pero, los partidos políticos ya tienen candidatas y candidatos a los cargos de elección popular en disputa. En el tiempo denominado de “intercampañas”, terminarán de pulirse las estrategias para iniciar con el último tramo de la carrera, ahora sí convencer a los electores. No hay nada para nadie ni ventajas definitivas, cualquier hándicap desapareció e inician parejos; ninguno la tiene fácil.
Este es el tiempo en el cuál los ciudadanos tomamos el poder absoluto pues será nuestra decisión la que otorgue el triunfo o la derrota, es el momento en el que podemos exigir a candidatas y candidatos, que se mostrarán sumisos y despojados de su soberbia para solicitar el voto. Quienes participen en una elección, mujeres y hombres, deben ser transparentes en todos y cada uno de los aspectos de su vida, mostrarse tal cual son para así poder elegir de forma adecuada. Muchas veces hemos sido engañados y esto debe parar, no lo podemos volver a permitir ni tolerar.
Uno de los casos más sonados y recientes fue Fausto Vallejo Figueroa. Su ambición de poder y necesidad de impunidad lo llevaron a mentir y ocultar su estado de salud. Ahí queda la lastimosa imagen del 30 de septiembre del 2012 cuando, durante los actos cívicos conmemorativos por el natalicio de Don José María Morelos se desvaneció. Wilfrido Lázaro, entre otros, se apresuraron a ocultarlo en Casa Sitio de Morelos mientras su equipo cercano se multiplicaba mintiendo al afirmar que, “Fausto se encuentra muy bien, solo fue un pequeño mareo”. Luego, ya sabemos que fue lo que pasó.
Candidatas y candidatos están obligados a presentar, de forma clara y contundente, su estado de salud, aficiones, adicciones y preferencias; deben dejar de ocultarse en el fango de las “cuestiones personales” y abrirse por completo a sus electores. Para alguien que aspira a un cargo de elección popular, hay muy poco espacio de privacidad pues su desempeño será público.
Muchos de los que aparecerán en la boleta sufren de enfermedades crónicas o dependen física y psicológicamente de alguna sustancia. Algunas y algunos, no pasarían la más sencilla prueba para determinar si consumen alguna droga. ¿Quiere usted a un adicto como su gobernador o presidente municipal? La opacidad es una mentira.
Merecemos hombres y mujeres sanos con uso pleno de sus facultades psicológicas, emocionales y mentales, nuestros representantes deben estar en buen estado de salud. De no ser así, con toda franqueza hablar de los problemas que enfrentan; sufrir una enfermedad no es pecado o delito, ocultarla es una omisión perversa.
¿Antidoping para todas las candidatas y candidatos?
