Morelia, Michoacán; 07 de agosto de 2020. A fin de garantizar el derecho a la
salud y verificar las condiciones en que opera para la salvaguarda de los
derechos fundamentales de las personas adultas mayores, la Comisión Estatal
de los Derechos Humanos (CEDH) realizó una supervisión al Patronato de
Nuestra Señora de Guadalupe para la Atención del Anciano I.A.P, ante los
casos de Covid-19 registrados en su interior.
Por instrucción del encargado del Despacho de la Presidencia, Uble Mejía
Mora el coordinador de Orientación Legal, Quejas y Seguimiento, Ángel Botello
Ortiz, desplegó personal del área médica y de la dirección de quejas para que
realicen las diligencias necesarias y observar la atención no solo de las
personas adultas mayores que son atendidas en esa institución, sino del
personal que ahí labora.
Lo anterior para garantizar que se brinden todas las atenciones necesarias
para salvaguardar su salud y bienestar, así como para verificar el respeto a
otros derechos humanos como a la vida, a la alimentación, a la integridad, a la
asistencia y seguridad social, a la no violencia, al acceso a los servicios y a un
ambiente sano.
Ante la necesidad de material e insumos para atender la contingencia sanitaria
en la que se encuentran, el personal del organismo proporcionó cubrebocas,
por ser uno de los aditamentos de uso obligados por la autoridad estatal; y se
mantendrá atenta a las necesidades que se requieran atender en esa
institución.
Esta CEDH observa el abandono no solo familiar y social sino incluso
institucional, en el que se encuentran las personas adultas mayores en la
entidad, al observar situaciones como la falta de atención medica de manera
generalizada en la mayoría de las instituciones que se dedican a la atención de
este grupo de la población; además la falta de equipo especializado, de
personal capacitado y de la insuficiente infraestructura para garantizar una
estancia digna y segura.
Ante este panorama esta Comisión advierte la necesidad de coordinar acciones
para atender el abandono en que se encuentran las personas adultas mayores
y garantizar el pleno ejercicio de sus derechos fundamentales; ante factores
como pobreza alimentaria, falta de acceso a la salud, a la vivienda, a la
seguridad social, el abandono, la desigualdad y la discriminación.