Por Rafael Rivera Millán
Ciudad Lázaro Cárdenas, Michoacán, 28 de diciembre 2017.- Prestadores de servicios turísticos de la costa michoacana, mostraron su satisfacción por la buena afluencia de paseantes que hay en esta temporada vacacional de fin de año, pues al día de ayere, la ocupación hotelera de las poco más de tres mil habitaciones que hay en Lázaro Cárdenas, Aquila y Coahuayana, se encontraban ya al 85 por ciento, esperando que el fin de semana la cifra alcance el cien por ciento.
Lo anterior fue señalado por Jorge Mendoza Garibay, Presidente de la Asociación de Hoteles y Restaurantes de la Costa Michoacana, quien señaló que también esta época del año viene a ser un gran alivio económico para todos los prestadores de servicios, pues se espera una buena derrama económica, tanto en hoteles, restaurantes como en la venta de artesanías de la región, realizadas principalmente a base de palma de coco.
Dijo que se estima la visita diaria de unos 15 mil turistas, provenientes de los destinos tradicionales que tiene la costa michoacana como lo son el interior de Michoacán, Jalisco, Colima, Estado de México, Ciudad de México, Guanajuato y Querétaro, además de paseantes extranjeros que gustan del turismo de aventura o ecológico, quienes visitan principalmente la zona de Maruata y Faro de Bucerías en el municipio de Aquila.
El dirigente y empresario hotelero de Playa Azul, mencionó que en lo que se refiere a derrama económica, una familia compuesta de cuatro miembros, gasta diariamente en hospedaje un promedio de 600 pesos y otros mil pesos más en alimentos, por lo que se estima una considerable derrama económica de aquí al día primero de enero del 2018.
Mencionó que el sector turístico está en constante coordinación y comunicación con las autoridades de los tres niveles de gobierno y los organismos que brindan auxilio, como Protección Civil, Cruz Roja y de Salvavidas Voluntarios, entre otros, para buscar que el saldo en estas vacaciones de fin de año, sea blanco, por lo que sobre todo los enramaderos explican a sus clientes los sitios peligrosos en donde no se deben de meter a bañar al mar, y sobre todo en estado de ebriedad, para evitar alguna desgracia que empañe sus vacaciones.